Muchas veces me preguntan cuál es la diferencia real entre un empleado y y una Asistente Virtual y si de verdad es más rentable.
Para ello, hemos hecho una sencilla comparativa de costes.
Por un lado, cuando hablamos de jornada completa, estamos pensando en las 160 horas mensuales que un trabajador trabaja por ley. Verás que hemos puesto solo 40 horas mensuales de una Asistente virtual. ¿Por qué? Porque trabajamos sin las interrupciones clásicas de la oficina, sin pausas de café, servicio o comida imputables al cliente. Sin todas estas interrupciones nuestra productividad es por lo menos 4 veces mayor que la de un empleado.
Una empresa paga un 35,5% más al año para su empleado, sin contar con los gastos de oficina, equipamiento, etc.
Vale, me diréis que solo necesitáis a alguien a media jornada. Los costes para tu empresa serían estos:
y ahora, piensa. ¿Me es rentable una Asistente Virtual?
Sí! Y hay más: Una Asistente virtual trabaja com muchas empresas en muchos campos distintos. Esto le confiere un conocimiento del mercado y de empresas que un empleado normal sería complicado que lo igualara. Por otro lado, una Asistente virtual te podrá ayudar a mejorar procesos dentro de tu empresa y traerlos al siglo XXI si hace falta ya que se preocupa de formarse constantemente. ¿Tus empleados también lo hacen? ¿De verdad?